Carlos Alcaraz ha dejado su huella en el Pala Alpitour de Turín, donde intenta convertirse en uno de los aspirantes más jóvenes de siempre en el evento broche de temporada.
El No. 2 mundial, de 20 años, firmó la primera victoria de su carrera en las Nitto ATP Finals, batiendo por 7-5, 6-2 a Andrey Rublev para mantener vivo el objetivo de alcanzar las semifinales. En un choque entre dos jugadores obligados a la victoria, el murciano exhibió una impecable capacidad de supervivencia.