En Alta Córdoba ya comenzó la reconstrucción deportiva y Instituto va por Franco Jara para solucionar la falta de gol, mientras avanza por un arquero para reforzar el otro extremo del equipo.

La temporada terminó con sabor amargo y en Alta Córdoba ya trazan un objetivo urgente: recuperar el peso ofensivo perdido durante todo el año. En ese camino, Instituto va por Franco Jara como la principal apuesta para resolver la falta de gol que marcó una campaña irregular, y a la vez acelera gestiones por un arquero. La reconstrucción del plantel ya está en marcha y promete movimientos fuertes.

Si algo caracterizó a La Gloria en 2024 fue la escasa efectividad: apenas 9 tantos en el segundo semestre y 25 en toda la temporada. Una cifra que golpeó la tabla, el ánimo y los planes tácticos de los distintos cuerpos técnicos que pasaron. Por eso, en 2025 el club quiere cortar el ciclo de intrascendencia y renovar las esperanzas. La necesidad de sumar un delantero de jerarquía se volvió prioridad absoluta.

En ese contexto surge el nombre de Franco Jara, recientemente marginado de Belgrano y listo para escuchar propuestas. El delantero surgido en Arsenal, con pasos por Europa, Benfica y Pachuca, aparece como el elegido para liderar el ataque albirrojo. A sus 37 años, el atacante villamariense podría convertirse en una de las incorporaciones más resonantes desde el regreso a Primera División.

Según trascendió, Instituto ya preguntó condiciones por el jugador después de que se confirmara que no será tenido en cuenta en el Pirata para la próxima temporada. Jara dejó Córdoba sin buenos recuerdos y con un mensaje cargado de dolor hacia la dirigencia celeste: “Vine por amor y duele irme sin que me miren a los ojos, con el respeto que me merezco”, escribió en sus redes. En su paso por Belgrano anotó 29 goles en 90 partidos.

Mientras analiza sumar poder ofensivo, La Gloria también pretende reforzar el arco. Y allí aparece otro nombre fuerte: Lautaro Maldonado, arquero de 24 años que viene de conseguir el ascenso con Midland desde la B Metropolitana hacia la Primera Nacional. Las charlas están avanzadas y su llegada podría concretarse en los próximos días.

Con el plantel licenciado, la dirigencia trabaja en silencio pero con decisión. Así, el mercado recién comienza y ya deja sus primeras señales firmes. Hasta ahora, lo más destacado es:
– El interés firme por Franco Jara.
– La negociación avanzada con Lautaro Maldonado.
– La búsqueda de reforzar ambas áreas pensando en un 2025 competitivo.

En medio de la previa a la final del Torneo Clausura, Verón al TAS por la sanción impuesta por el Tribunal de Disciplina de AFA reabre un conflicto que ya estalló en todos los frentes.

La tensión vuelve a encenderse en el fútbol argentino: Verón apela su sanción en el TAS será el nuevo capítulo de un conflicto que ya atravesó canchas, pasillos, redes sociales y despachos de dirigentes. Mientras Estudiantes de La Plata se prepara para disputar la final del Torneo Clausura ante Racing, su presidente, Juan Sebastián Verón, decidió llevar su caso al Tribunal Arbitral del Deporte, con sede en Lausana, para apelar la suspensión de seis meses que le impuso el Tribunal de Disciplina de la AFA tras el escándalo del pasillo de espaldas frente a Rosario Central.

La sanción, dictada el 27 de noviembre, determinó que Verón era responsable de ordenar la polémica formación de su plantel dándole la espalda al equipo rosarino, proclamado campeón de la tabla anual por la AFA. Para el dirigente pincha, la decisión es “arbitraria” y vulnera su posibilidad de ejercer sus funciones institucionales, motivo por el cual recurrirá al máximo organismo deportivo internacional en busca de que el castigo quede sin efecto.

Las consecuencias del fallo no recayeron únicamente sobre el presidente. Los 11 titulares de Estudiantes que participaron del gesto recibieron dos fechas de suspensión, mientras que el capitán de la jornada, Santiago Núñez, quedó imposibilitado de portar la cinta durante tres meses. La medida generó un cruce inmediato entre sectores de la dirigencia del club y altos funcionarios de la AFA.

Entre ellos se destacó la figura de Pablo Toviggino, tesorero de la Asociación y hombre de extrema confianza de Claudio Tapia, quien, sin nombrarlo, calificó a Verón como “enemigo” en redes sociales apenas un día después del fallo. El ida y vuelta digital volvió a exponer un vínculo deteriorado desde hace tiempo.

La Brujita, lejos de bajar el tono, respondió a través de declaraciones en las que manifestó estar preocupado por las amenazas dirigidas hacia la institución: “Sobre mi persona, lo tomo como una chicana y me río, pero la amenaza a una institución como Estudiantes es grave. Decir que en 2026 la va a pasar mal es una bajeza. Vamos a tener que estar atentos”, expresó.

Con el equipo enfocado en la final y la dirigencia en plena estrategia legal, el conflicto suma un nuevo capítulo que podría derivar en repercusiones nacionales e internacionales. Hasta ahora, los puntos salientes fueron:

• La sanción de seis meses a Verón.
• Las suspensiones para los futbolistas.
• Las declaraciones de Toviggino.
• La escalada institucional que ahora llega al TAS.

El Rojo empezó a moverse en el mercado: el DT acercó el nombre del goleador de Tigres como posible refuerzo para 2026, aunque la operación luce compleja.

En pleno análisis de lo que será la temporada 2026 y con la mira puesta en reforzar uno de los sectores más sensibles del plantel, la dirigencia del Rojo recibió una propuesta directa del cuerpo técnico: “Nico Ibáñez a Independiente” se convirtió en uno de los temas del momento en Avellaneda. El entrenador Gustavo Quinteros acercó el nombre del delantero argentino que actualmente milita en Tigres, aunque su llegada aparece como una negociación difícil sin ventas previamente concretadas.

El objetivo del club es claro: aumentar el poder ofensivo de un equipo que, más allá de algunas individualidades, necesita competencia interna y variantes. En ese plan, el nombre de Nicolás Ibáñez —de pasado en Comunicaciones y Gimnasia LP— comenzó a tomar fuerza, aunque todavía se mantiene en condición de “opción lejana”.

A los 31 años, Ibáñez acumula 134 goles en 372 partidos y una amplia experiencia en el fútbol mexicano, donde brilló en Atlético San Luis y Pachuca antes de llegar a Tigres. Para Quinteros, su potencia, su capacidad para jugar de espalda y su presencia en el área encajan con lo que busca para acompañar o competir con Gabriel Ávalos, el único 9 natural del plantel tras el préstamo de Ignacio Maestro Puch a Puebla.

Sin embargo, las trabas son evidentes. Ibáñez todavía tiene un año más de contrato en Tigres y su salario es muy elevado para la estructura actual de Independiente. Además, el club necesita primero concretar alguna venta para mejorar su posición en el mercado.

En paralelo, Independiente también evalúa la situación de Alexis Cuello, delantero de San Lorenzo cuya relación con la dirigencia azulgrana está tensa por una deuda impaga. Su perfil aparece como un Plan B más terrenal.

En medio de estas negociaciones, el Rojo continúa enfocado en cerrar el año y definir si logrará entrar a la próxima Copa Sudamericana, un aspecto clave para seducir a refuerzos de jerarquía.