El Cruzeiro de Belo Horizonte ha dado un golpe contundente en su camino hacia las semifinales de la Conmebol Sudamericana. Imágenes: Prensa Cruzeiro

Este jueves, el equipo brasileño se impuso 2-0 a Libertad en el partido de ida de los cuartos de final, disputado en el Estadio Defensores del Chaco en Asunción, lo que lo deja en una posición muy favorable para el encuentro de vuelta.

Desde el primer minuto, Cruzeiro mostró su intención de dominar el encuentro. Con un control evidente del balón y una presión constante, los dirigidos por Fernando Seabra generaron numerosas oportunidades, dejando a Libertad desorganizado y sin capacidad de respuesta. A los 19 minutos, el delantero Kaio Jorge abrió el marcador con un potente remate diagonal que dejó sin opciones al arquero Martín Silva, desatando la alegría de los hinchas brasileños.

A pesar de la desventaja, Libertad intentó reponerse, aumentando su posesión en el medio campo. Sin embargo, sus esfuerzos fueron infructuosos, ya que la escuadra paraguaya no logró inquietar a Cassio, el arquero de Cruzeiro, quien se mostró seguro y firme ante los escasos ataques de los locales. La falta de precisión y profundidad en el juego de Libertad fue evidente, lo que facilitó el control del partido por parte del equipo visitante.

En el segundo tiempo, Libertad buscó revertir la situación y mostró una mejor actitud ofensiva. La entrada de Roque Santa Cruz le otorgó mayor dinamismo a la delantera paraguaya. A los 59 minutos, un cabezazo de Gustavo Aguilar estuvo cerca de igualar el encuentro, pero el balón se fue por encima del arco, reflejando la falta de efectividad del Repollero.

Con el marcador 2-0, Cruzeiro se dedicó a gestionar el partido. Lautaro Díaz, quien había ingresado como sustituto, amplió la ventaja en el minuto 48 al aprovechar un rebote en el área, elevando el balón con un toque sutil sobre Silva, dejando claro el dominio brasileño en el encuentro.

Libertad, impotente y sin ideas claras, no logró articular un juego que pudiera poner en aprietos a los brasileños. A pesar de algunos intentos de Álvaro Barreal y Kaiki Bruno, el equipo paraguayo no encontró el camino hacia el gol.

Con este resultado, Cruzeiro se posiciona como firme candidato a avanzar a las semifinales, aunque aún queda un encuentro por disputarse. El partido de vuelta se llevará a cabo el 26 de septiembre en el mítico Estadio Mineirão de Belo Horizonte, donde los brasileños buscarán sellar su clasificación, mientras que Libertad tendrá la difícil tarea de revertir el marcador y seguir en la lucha por el título. La afición espera una respuesta contundente de su equipo en su casa, pero Cruzeiro ya ha dejado claro que está listo para el desafío.

En un partido disputado en el Estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini de Independiente, Huracán demostró su superioridad y se impuso 1-0 ante Talleres de Remedios de Escalada en los cuartos de final de la Copa Argentina. Imágenes: Prensa Copa Argentina

El único gol del encuentro fue anotado por Eric Ramírez a los 32 minutos del primer tiempo, tras un preciso centro de Lucas Carrizo.

El triunfo permite a Huracán regresar a las semifinales del torneo, donde se medirá ante Central Córdoba de Santiago del Estero, que el martes superó 2-1 a Temperley en San Nicolás. Este será un momento crucial para el equipo, que busca repetir su éxito histórico de la temporada 2013-2014, cuando se consagró campeón.

A pesar de que Huracán dominó el partido, no estuvo exento de complicaciones. Lucas Carrizo tuvo la oportunidad de aumentar la ventaja desde el punto penal a los 17 minutos del segundo tiempo, pero su remate fue detenido por el arquero Damián Tello, quien se lució con una gran atajada.

Talleres, dirigido por Mario Gómez, mostró un gran esfuerzo en busca del empate, siendo ovacionado por su hinchada al final del encuentro. A pesar de su exitosa campaña en la Copa, el equipo se encuentra antepenúltimo en la Primera Nacional.

Huracán, que ha tenido un desempeño irregular en el Torneo de la Liga, espera con ansias su enfrentamiento con Central Córdoba, mientras se mantiene firme en su objetivo de volver a alzar el trofeo de la Copa Argentina.

Los hinchas del Globo, que vivieron una gran racha de 18 partidos sin perder, ahora ven la oportunidad de revivir viejos tiempos con una nueva hazaña en el torneo federal.

Racing Club no logró capitalizar su buen inicio y sufrió una derrota por 1-0 en su visita a Athletico Paranaense en el partido de ida de los cuartos de final de la CONMEBOL Sudamericana. Imagen: Prensa Racing

A pesar de mostrar un rendimiento superior en gran parte del encuentro, el equipo argentino se vio superado por un gol en el minuto 38 del primer tiempo, anotado por João Cruz, quien ingresó por Bruno Zapelli, lesionado.

El partido, que marcó el primer enfrentamiento oficial entre ambos equipos, comenzó con Racing imponiéndose con claridad. A los 10 minutos, Agustín Almendra habilitó a Adrián Martínez, cuyo potente remate fue despejado a córner por el arquero local, Mycael. La Academia continuó dominando, con un aviso de Gastón Martirena a los 33 minutos, cuyo fuerte derechazo se fue apenas desviado.

Paranaense, que apenas inquietó con pelotazos al veloz Gonzalo Mastriani, encontró la ventaja inesperadamente a través de João Cruz, quien convirtió tras una gran asistencia de Agustín Canobbio. La reacción de Racing llegó justo antes del descanso, cuando un gol de Maximiliano Salas fue anulado por posición adelantada de Martínez, lo que dejó a los visitantes frustrados.

En la segunda mitad, Racing intentó reaccionar, pero Paranaense se mostró más seguro en defensa. A los 26 minutos, el equipo brasileño estuvo cerca de aumentar la ventaja, pero el arquero chileno Gabriel Arias evitó la caída de su arco en un par de ocasiones. A pesar de los esfuerzos de Racing, incluyendo un potente disparo de Roger Martínez, el marcador no se movió.

Con esta derrota, Racing Club se enfrenta a una dura tarea en la revancha, programada para el próximo jueves 26 en Avellaneda. La Academia, líder en la fase de grupos de la Sudamericana, busca revertir la situación y avanzar a las semifinales, con el torneo como su principal objetivo del año.