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Argentino de Quilmes desistió contratación y dio marcha atrás con una decisión que había generado fuerte repercusión. Tras anunciar el fichaje de Alexis Zárate, el club informó menos de 24 horas después que no avanzará con su incorporación para la próxima temporada de la Primera B.
La situación generó sorpresa, debate y una rápida rectificación. Argentino de Quilmes desistió contratación y decidió no avanzar con la llegada de Alexis Zárate, lateral derecho que había sido anunciado oficialmente como refuerzo para la temporada 2026 de la Primera B Metropolitana. El giro se produjo menos de 24 horas después del comunicado inicial, en medio de una fuerte repercusión pública.
Durante la tarde del viernes, el “Matecito” había informado en sus redes sociales que Zárate se transformaba en nuevo futbolista del club. El anuncio no pasó desapercibido: el defensor venía de quedar en libertad tras cumplir cinco años de prisión por una condena por abuso sexual, un antecedente que rápidamente generó cuestionamientos y reacciones en redes sociales y distintos sectores del ambiente futbolístico.
Este sábado al mediodía, la institución emitió un nuevo comunicado oficial confirmando la decisión de dar marcha atrás.
“Queremos informarles que el presidente, junto con la Comisión Directiva, ha decidido desistir de la contratación de Alexis Zárate”, expresó Argentino de Quilmes en sus canales oficiales. El mensaje agregó: “Desde la dirigencia, Secretaría Técnica y Cuerpo Técnico, continuamos trabajando para formar el mejor plantel para encarar el torneo 2026”.
Zárate, surgido de las divisiones inferiores de Independiente y con un paso posterior por Temperley, había sido condenado a seis años y seis meses de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Lomas de Zamora. La sentencia fue dictada en 2017 y confirmada en 2020, año en el que el futbolista quedó detenido. Su salida de la cárcel se produjo luego de cumplir cinco años, beneficiado por buena conducta y gestiones de su defensa.
Según estableció la Justicia, el hecho ocurrió en marzo de 2014 en un departamento de Wilde. La víctima fue Giuliana Peralta, quien entonces era pareja de Martín Benítez, compañero de Zárate en Independiente. Durante el proceso judicial, Peralta declaró: “Me desperté porque me estaban abusando y era el amigo de él”. El defensor, por su parte, nunca reconoció los hechos por los cuales fue condenado.
Mientras avanzaba la causa, Alexis Zárate continuó su carrera en Liepaja, de Letonia, en 2018. Antes de quedar detenido en 2020, trabajaba en la fábrica de pastas de su suegro, a la espera de definiciones judiciales.
Con esta decisión, Argentino de Quilmes desistió contratación y cerró un episodio que dejó al descubierto la complejidad de determinadas decisiones en el fútbol actual, donde lo deportivo, lo institucional y lo social se entrecruzan de manera inevitable.


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