Un empate sin goles dirigió a Inglaterra a los octavos de final como primera de grupo y completó la clasificación de Eslovenia, que jugará las eliminatorias del torneo por primera vez en su historia, tras un encuentro anodino, equilibrado, sin apenas ocasiones y cerrado con el 0-0. EFE

Una Inglaterra gris, con problemas en la elaboración de juego, no pasó este martes del 0-0 ante Eslovenia, pero de todas maneras se quedó con el primer puesto del Grupo C de la Eurocopa porque, en el otro partido de la zona, Dinamarca y Serbia también igualaron en cero.

El equipo británico fue en este partido lo mismo que en lo que va de torneo: un conjunto repleto de estrellas que parecen no entenderse.

Con el dominio del balón y destellos de sus figuras, no le alcanzó ante una Eslovenia ordenada y que siempre buscó plantársele de igual a igual a los hombres de Gareth Southgate.

A tal punto que la primera jugada colectiva de Inglaterra llegó a los 92 minutos, en un contraataque rápido que encabezó Harry Kane, quien cedió para un Phil Foden que llegaba por la derecha y definió de primera. Jan Oblak atajó abajo, sin mayores problemas.

En varios tramos del encuentro, daba la sensación de que Foden, Kane y Jude Bellingham jugaban con diferentes tácticas: cuando uno iba al espacio, el otro retenía el balón; cuando otro esperaba por la banda, su compañero encaraba hacia el medio.

Por la categoría de su plantel, Southgate tiene todas las chances abiertas de lograr una mejoría sustancial de cara a unos octavos de final en los que, por terminar primero en su grupo, evitó enfrentarse a Alemania.

No pudieron romper el cero en el cierre entre Dinamarca, que pasaron a octavos de final donde enfrentarán a Alemania y Serbia que quedaron eliminados.

Dinamarca y Serbia no se sacaron ventaja en el Allianz Arena de Múnich y los dirigidos por Kasper Hjulmand se quedaron con el segundo lugar para jugar los octavos de final de la Eurocopa 2024.

Gracias al 0-0 entre Inglaterra y Eslovenia, los daneses consiguieron ser escoltas, ganando la pulseada. Es que se encuentran en igualdad de condiciones con los de Matjaz Kek que, por cuentas, se clasificaron como uno de los mejores terceros con tres puntos, al igual que Dinamarca. Mismos puntos, partidos ganados y empatados, mismas tarjetas amarillas y sin diferencia. La mejor posición del Ranking UEFA, donde ocupan el puesto 16, mientras que Eslovenia el 30, fue la determinación final por el segundo puesto.

Los números del grupo son insólitos: seis partidos, un triunfo y cinco empates. La única victoria fue la de Inglaterra sobre Serbia en el estreno, con un 1-0 obra de Jude Bellingham. Pero luego el equipo inglés empató 1-1 con Dinamarca y sin goles frente a Eslovenia. En el resto de los partidos, en la primera fecha Eslovenia y Dinamarca repartieron puntos con un 1-1, al igual que Eslovenia y Serbia en la segunda jornada. En cuanto a goles, se anotaron apenas 7 en los 6 partidos que se jugaron.

Si bien es un registro atípico, no hay que remontarse muy lejos para encontrar un antecedente, aunque es un hecho singular en la Euro. Ocurrió en la Copa del Mundo de 1990, con Inglaterra nuevamente como protagonista, compartiendo grupo con Irlanda, Países Bajos y Egipto. En aquella ocasión los Tres Leones igualaron 1-1 con Irlanda, 0-0 con Países Bajos y se impusieron por la mínima ante Egipto para avanzar a octavos de final.

Francia y Polonia empataron 1-1 en el Signal Iduna Park de Dortmund, por la tercera fecha del grupo D de la Eurocopa. Con este resultado, más el triunfo 3-2 de Austria sobre Países Bajos, los austríacos ganaron la zona, Francia lo escoltó y Países Bajos, como uno de los mejores terceros, se clasificaron a los octavos de final de la competición

Kylian Mbappé retornó después de la lesión en su nariz y marcó su primer gol en el torneo, de penal. El empate llegó por la misma vía, gracias a Robert Lewandowski.

Tras ganar con lo justo en el debut ante Austria y empatar sin goles contra Países Bajos, Francia estaba en deuda. El subcampeón del mundo, uno de los grandes favoritos al título, no mejoró su imagen y llega a octavos de final después de tres actuaciones pobres.

Extraño fue ver a Antoine Griezmann en el banco de los suplentes. El jugador del Atlético de Madrid arrancó el partido como suplente, 18 partidos después de la última vez que ocurrió a las órdenes de Didier Deschamps, en el tercer encuentro de la fase de grupos del mundial de Qatar 2022, sin nada en juego.

El arranque del duelo fue un toma y daca con situaciones delante de los dos arcos, bien resueltas por Łukasz Skorupski (el guardameta polaco del Bologna) y Mike Maignan (portero francés del Milan).

A los 6, una buena pared entre Zielinski y Lewandowski, para que el esférico se le quedara totalmente franco al centrocampista del Nápoles, tras un despeje. Este se sacó una preciosa volea desde el borde del área, pero Maignan se estiró con todo para asegurar la pelota.

A los 34 llegó la más clara para los polacos. Un pase profundo para la carrera de un Piotr Zielinski que llegó a la línea de fondo y el centrocampista del Nápoles puso un gran centro hacia el segundo palo, donde Lewandowski sacó un potente cabezazo, que se marchó cerca del poste derecho (rozada por el arquero de Francia como bien reclamaba el 9 del Barcelona ante la nula respuesta del árbitro italiano Marco Guida).

Francia alcanzó su mejor versión en un par de jugadas sobre los 42 minutos, cuando se encendió Mbappé. En la primera, Barcola amagó con el tiro y asistió al capitán francés, que se quedó mano a mano ante Skorupski, pero su lanzamiento buscando el palo largo lo desvió el portero del Bolonia con una mano; la segunda, espectacular combinación por izquierda y el pase de Mbappé, que buscaba la entrada de Kanté, fue cortado justo a tiempo por Szymanski.

Y ya en tiempo de descuento, otra vez pase de Barcola para dejar mano a mano a Mbappé, con un taco tremendo y el ahora jugador del Real Madrid optó por definir hacia el palo corto en esta ocasión, pero Skorupski volvió a meter la mano para evitar el gol francés.

En la segunda parte la tónica arrancó con mucha intensidad del lado francés y con Kiki Mbappé haciendo revolcar a Skorupski más de una vez para sostener el 0 en su arco.

Y de tanto ir Francia logró desnivelar. Démbelé propuso el enésimos mano a mano por la banda derecha y cuando entró al área el central del Arsenal, Jakub Kiwior, lo tumbó. Penal sin ninguna discusión, como tampoco la hubo cuando tomó la pelota Mbappé para transformarlo en gopl y darle la victoria parcial a Francia para pasar a comandar las posiciones en el Grupo D.

Reaccionó Polonia con un par de tiros de lejos, hasta que Upamecano pisó a Swiderski en el área y el juez (luego de revisarlo en el VAR) sancionó el penal. Lo ejecutó Lewandowski y en primera instancia lo detuvo Maignan., pero tras comprobar que se adelantó, repitieron la ejecución y esta vez el 9 del Braza no falló y 1 a 1.

Luego, hasta el final, ambos lucieron conformes con el empate.