El regreso de Novak Djokovic al ATP Masters 1000 de Shanghái es una de las noticias más destacadas del tenis post US Open.

El serbio, que no compite en este torneo desde 2019, se unirá a una impresionante alineación de estrellas que incluye a Jannik Sinner, Carlos Alcaraz y Alexander Zverev. El torneo, que se celebrará del 2 al 13 de octubre en el Qizhong Forest Sports City Arena, promete ser uno de los eventos más destacados de la temporada.

Djokovic, con 37 años y una carrera que sigue cosechando éxitos, se muestra entusiasta por su regreso a China. “Tengo muchas ganas. Estoy muy emocionado por ver a mis aficionados chinos, a todos los fans del tenis”, comentó Djokovic en una reciente declaración. “Es uno de los torneos más bonitos del mundo. Cinco años han sido demasiado sin visitar China, así que tengo muchas ganas de que llegue”.

El serbio, que ostenta un récord de 34-5 en el Qizhong Forest Sports City Arena, llega a Shanghái tras un verano del hemisferio norte intenso en el circuito. En agosto, Djokovic conquistó su primer título de 2024 en los Juegos Olímpicos, pero su participación en el US Open terminó en una sorprendente tercera ronda.

Ahora, Djokovic buscará consolidar su candidatura a las Nitto ATP Finals, donde actualmente ocupa la octava posición en la PIF ATP Live Race To Turin. Este evento, de gran prestigio, podría marcar su 17ª clasificación al torneo de final de temporada, un objetivo importante para el veterano tenista.

La edición de este año también contará con Hubert Hurkacz, el vigente campeón, y una destacada representación local. Zhang Zhizhen, actualmente en la posición No. 41 del PIF ATP Rankings, será una de las esperanzas chinas. Además, la joven promesa Shang Juncheng, parte de la #NextGenATP, también estará en el cuadro, sumando aún más interés y emoción al torneo.

Con una alineación estelar y el retorno de Djokovic a un escenario que ha sido históricamente favorable para él, el ATP Masters 1000 de Shanghái se perfila como un evento imperdible en el calendario del tenis. La mezcla de veteranía y juventud, combinada con la atmósfera vibrante del público chino, promete ofrecer un espectáculo de tenis de primer nivel.

Alexander Zverev, el cuarto cabeza de serie del US Open, no escatimó en palabras para describir su rendimiento en los cuartos de final, donde sucumbió ante el local Taylor Fritz en una épica batalla a cuatro sets.

El alemán, conocido por su potente revés a dos manos, se encontró con una versión inesperadamente defectuosa de su golpe más confiable, un hecho que marcó la diferencia en su derrota por 7-6(2), 3-6, 6-4, 7-6(3).

En la rueda de prensa posterior al partido, Zverev se mostró visiblemente frustrado y crítico consigo mismo. “No recuerdo desde que estoy en el Tour haber golpeado tan mal mi revés. Simplemente no lo recuerdo”, afirmó el alemán. “Estaba fallando tiros que estaban en el centro de la pista sin ritmo, en el fondo de la red. Terrible. Absolutamente terrible por mi parte”.

El revés de Zverev, que normalmente se considera uno de sus mayores activos, se convirtió en un punto débil durante el enfrentamiento con Fritz. El alemán cometió 15 errores no forzados con su revés, mientras que solo logró un ganador con ese golpe. “Mi derecha estuvo bien, la verdad. Mi saque estuvo bien. Pero mi tiro más fiable, el tiro por el que más se me conoce, el tiro que [podría] despertarme a las 3 de la mañana y no fallaría, no estuvo en absoluto ahí hoy”, expresó Zverev. “No tengo palabras para eso, para ser honesto”.

El partido, que se extendió por casi tres horas y media en el Arthur Ashe Stadium, mostró a un Zverev que luchó por encontrar su ritmo y gestionar la presión. A pesar de su notable esfuerzo para recuperar el segundo set, su falta de consistencia en el fondo de la pista y su incapacidad para capitalizar en los momentos clave se hicieron evidentes.

Zverev también remarcó su confusión y dudas durante el encuentro. “En un momento dado, ya no sabía qué hacer. En algún momento tuve tantas preguntas en la cabeza. No tenía ni idea de si debía ir a por ella, si debía meter la pelota en la pista. Cuando intentaba meterla, se iba al fondo de la red”, explicó. “Fui a por ella en algunos tiros, y volaron. El caso es que fallaba tiros como de dos metros, tiros desde la línea de fondo. No sé. Taylor se merecía ganar hoy. No le estoy quitando nada. Ha jugado un buen partido. Yo no hice nada para merecer ganar”.

A pesar de la decepcionante eliminación, Zverev deja el US Open con varios logros positivos a su nombre. Con un récord de 56 victorias y 17 derrotas en lo que va del año, lidera el ATP Tour en partidos ganados. Además, tras su actuación en Flushing Meadows, Zverev ha subido dos puestos en la clasificación, situándose como número dos en el PIF ATP Live Rankings y asegurando su lugar en las Finales de la ATP a finales de año.

El alemán, que fue finalista en el US Open 2020, aún aspira a igualar a Boris Becker como el segundo alemán de la Era Abierta en alcanzar tres semifinales de Grand Slam en una sola temporada. Aunque la derrota en Nueva York es un golpe duro, Zverev sigue siendo una figura prominente en el tenis, con mucho en juego y una sólida posición para cerrar el año con éxito.

Paula Badosa, tras su derrota en los cuartos de final del US Open ante Emma Navarro por 6-2, 7-5, no ocultó su desilusión y autocrítica en la rueda de prensa posterior al partido.

La española, que tuvo una destacada temporada de regreso con un título en Washington D.C. y su primera aparición en cuartos de final de un Grand Slam en tres años, se desmoronó después de tener una ventaja de 5-1 en el segundo set.

Badosa expresó su frustración de manera franca: “Estoy muy decepcionada con mi nivel hoy. Creo que ella jugó realmente bien y manejó la situación de manera excelente, y yo estuve completamente desastrosa”. La jugadora de 26 años, que había comenzado el día con confianza y sin problemas durante su calentamiento, admitió que el impacto de jugar en el Arthur Ashe Stadium por primera vez la abrumó.

“Simplemente pisé la cancha y me sentí rara”, dijo Badosa. “Me sorprendió a mí misma, porque normalmente me gusta jugar en estas situaciones, pero creo que no era la cancha. Era más el momento para mí, y verme a veces tan cerca, pero tan lejos al mismo tiempo y con un buen nivel. Tu mente, es muy difícil mantenerse en el presente. Creo que mi mente estaba en todas partes excepto en el presente”.

Badosa, que ha trabajado intensamente para mejorar su concentración, reconoció que este aspecto ha sido tanto una fortaleza como una debilidad a lo largo de su carrera. “A veces, quererlo tanto y pensar en el futuro me ha perjudicado. No puedo ni siquiera concentrarme en el momento. Y creo que hoy fue un poco eso”, añadió.

A pesar de la decepcionante derrota, Badosa está en una posición mucho mejor ahora que hace un año. Después de recuperarse de una fractura por estrés en la espalda, y tras un comienzo de temporada difícil, ha logrado un notable regreso. En los últimos seis meses, ha pasado de estar fuera del Top 80 a volver al Top 20 del ranking WTA y subir al Top 15 en la carrera hacia las Finales WTA. “Ahora digo que es un desastre, pero cuando empecé en Washington habría firmado por todos los resultados, seguro”, comentó Badosa. “Y viniendo de dónde vengo, tengo que estar feliz. No sé, tal vez soy la 15 en la Carrera, así que no esperaba eso hace unos meses. Así que en eso, estoy realmente orgullosa de mí misma”.

Sin embargo, la sensación de haber perdido una gran oportunidad en Nueva York es difícil de pasar por alto para Badosa. “Lo que me hace ser como soy hoy es un Grand Slam, y tu sueño siempre es llegar a las últimas rondas en un Slam. Actuar de la manera en que lo hice hoy, sé que si no fuera un Slam, lo habría hecho bien. Así que eso es lo que me hace sentir así hoy. Porque no supe manejarlo de la mejor manera”.

Con la próxima oportunidad de jugar en un Grand Slam aún a cuatro meses de distancia, Badosa se enfrenta a un largo período de espera. “Ahora tengo que esperar cuatro meses para el próximo Slam, así que apesta”, concluyó la española.

A pesar de la decepción, el futuro de Badosa sigue brillando, y su increíble regreso después de una difícil lesión subraya la fortaleza y determinación que la han definido a lo largo de su carrera.