La estructura del fútbol juvenil de Independiente entra en revisión tras la salida de Diego Colotto: Tocalli seguirá, pero no se descartan más cambios en el proyecto formativo.

La salida de Diego Colotto para asumir como mánager de Colón no solo disolvió la Secretaría Técnica que encabezaba en Avellaneda, sino que también encendió interrogantes sobre el futuro de la estructura del fútbol juvenil de Independiente, uno de los pilares estratégicos del club en medio de su necesario proceso de reconstrucción.

Por ahora, no hay confirmaciones oficiales sobre modificaciones para 2026, pero en el Rojo nadie descarta que esta partida genere movimientos en otros sectores. La dirigencia analiza cada área, y el fútbol formativo es uno de los espacios donde podría haber novedades en el corto plazo.

El que sí continuará —al menos por contrato y respaldo dirigencial— es Hugo Tocalli, coordinador del fútbol formativo. Con vínculo vigente hasta el 31 de diciembre de 2026, el histórico formador llegó al club en enero de 2023 de la mano de Gerardo Rojo, con el impulso de revitalizar un semillero que durante años entregó menos futbolistas de los esperados. Aunque en las últimas horas circularon rumores sobre una posible salida o reasignación de funciones, lo cierto es que no hay nada concreto. En caso de que la dirigencia decida mover piezas, se evaluará si el experimentado entrenador podría ocupar otro rol dentro de la estructura.

A su lado trabaja Alejandro Tocalli, hijo de Hugo, quien cumple tareas más específicas en las divisiones juveniles y tiene vínculo hasta diciembre de este año. Fue nombrado en 2024 como Coordinador General de las Inferiores, un puesto jerárquico por encima del de su propio padre. Previamente, había sido preparador físico en San Lorenzo y en la Primera del Rojo durante el ciclo de Leandro Stillitano.

La reestructuración no se limita solo a nombres. La dirigencia analizaba junto a Colotto un esquema más moderno de captación, scouting y seguimiento integral de futbolistas, un modelo que ahora deberá redefinirse. Su partida, aunque esperada, deja un vacío en una zona donde Independiente no puede permitirse retrocesos.

Los próximos días serán clave. El Rojo necesita estabilizar un proyecto juvenil que permita recuperar competitividad y volver a generar patrimonio deportivo. Con los Tocalli como pieza fija —al menos por ahora—, la dirigencia evalúa si es momento de profundizar cambios o sostener la base formada en los últimos dos años.

Hasta ahora, las noticias salientes son la salida de Colotto, la continuidad de Hugo Tocalli y la incertidumbre respecto al rol de Alejandro Tocalli dentro del nuevo esquema juvenil.

La continuidad de Zaniratto es hoy el tema más caliente en el Lobo tras la derrota en el clásico y el arribo de la nueva dirigencia. Cambios internos, negociaciones abiertas y decisiones que marcarán el 2026.

El día después del clásico no trajo alivio, pero sí movimiento. Con la llegada de la nueva conducción, la continuidad de Zaniratto en Gimnasia se transformó en el primer capítulo de una reconstrucción que será profunda. Tras quedar eliminado en el Clausura, el Lobo inició una etapa clave: ordenar su economía, volver a profesionalizar áreas críticas y definir quién conducirá el plantel principal en 2026.

Este martes, el plantel regresó a Estancia Chica para un cierre formal de año, mientras la dirigencia avanzó en la presentación del flamante Secretario Técnico, Germán Brunati, quien ahora toma decisiones de lleno. Aunque venía colaborando internamente, con su asunción oficial se abre un nuevo mapa deportivo que impacta en todas las estructuras del club.

Y dentro de ese escenario aparece el gran interrogante: la continuidad de Fernando Zaniratto, quien había logrado una racha histórica de cinco triunfos consecutivos antes del clásico. Si bien los resultados deportivos parecían allanar su renovación, la nueva dirigencia quiere revisar puntos que no terminan de convencer. Entre ellos, lo ocurrido en la antesala del clásico, cuando el plantel anunció una medida de fuerza por deudas, y también la intención de profesionalizar aún más el cuerpo técnico del DT.

El entrenador se reunió con el presidente Carlos Anacleto, en un primer encuentro que dejó un tono positivo pero no resolutivo. Habrá nuevas charlas en los próximos días. Zaniratto, muy valorado por el plantel y por gran parte del hincha, permanece expectante en medio de un club que intenta ordenar su futuro inmediato tras meses de crisis institucional.

Al mismo tiempo, aparecen problemas urgentes: sueldos atrasados a jugadores, médicos y empleados; y varias inhibiciones que condicionan el mercado de pases. El rearmado del plantel dependerá de destrabar estos puntos económicos.

Entre las buenas noticias sobresale la inminente vuelta de Nacho Fernández, cuyo regreso genera ilusión y liderazgo natural en un vestuario golpeado. Además, se analizará la posibilidad de repatriar a Milton Casco, quien dejaría River, y al juvenil Ignacio Miramón, a punto de regresar a Lille tras finalizar su préstamo en Boca.

En resumen, el día después deja certezas y dudas: la continuidad del DT, la crítica situación económica y los primeros nombres fuertes del rearmado del Lobo son hoy las noticias salientes.

En medio del caos institucional azulgrana, Perazzo rompió el silencio sobre su paso fugaz por San Lorenzo y reveló los motivos que lo llevaron a dar un paso al costado antes de asumir formalmente.

El clima político de San Lorenzo volvió a dejar daños colaterales y uno de ellos fue Walter Perazzo, quien finalmente habló con claridad sobre su frustrada llegada al club. En una entrevista extensa con SLP, Perazzo rompió el silencio sobre su paso y detalló por qué nunca llegó a convertirse en coordinador del fútbol juvenil, a pesar de haber sido anunciado en conferencia de prensa.

La crisis institucional que atraviesa el Ciclón desde el estallido del escándalo político —que incluyó renuncias, internas y un vacío de poder— afectó a todas las áreas del club. En ese contexto, Perazzo quedó atrapado en un proceso que jamás terminó de concretarse. “La situación la vivo y la veo como cualquier simpatizante. Con confusión, incertidumbre, indecisiones… y eso complica el día a día. No es el camino”, relató el exgoleador, que observó el caos desde adentro y también desde la perspectiva del hincha que siempre fue.

Aunque fue presentado públicamente, Perazzo confesó que nunca pudo comenzar a trabajar. “En este tiempo nadie me llamó. La realidad es que, más allá de que me presentaron, no empecé. Quedé en hablar con Moretti, pero no pasó”, explicó. La falta de comunicación y la ausencia total de estructura lo empujaron a alejarse antes incluso de firmar el contrato.

El exdelantero aclaró que no se sintió utilizado, pero sí inmerso en una disputa política que nada tenía que ver con su función. “Me ofrecieron trabajar con todo el fútbol juvenil. Lamentablemente hubo un tema ajeno a lo deportivo: se metió lo político y ya no se pudo hacer. Me contrataba San Lorenzo para hacer algo que me gusta y en el club del que soy hincha”, expresó.

Respecto a un eventual regreso cuando el club recupere estabilidad, Perazzo fue contundente: “Estoy dispuesto a colaborar porque es mi club, pero si no le sumo, no sirve. Prefiero esperar y ver cómo se da todo lo institucional y político, que está convulsionado”. Sus palabras mostraron una mezcla de amor por San Lorenzo y prudencia ante un panorama incierto.

Hoy, Perazzo observa desde la distancia mientras el Ciclón continúa sin resolver su mapa interno. Todo dependerá de cuándo llegue esa ansiada normalidad que Boedo no encuentra desde hace meses.

En síntesis, las noticias salientes hasta el momento son:

– Walter Perazzo nunca asumió como coordinador de Inferiores.
– Falta total de comunicación y ausencia de contrato.
– La política interna del club interfirió en el proyecto.
– El exgoleador no descarta volver, pero solo en un clima estable.